miércoles, 10 de octubre de 2012

A 1000 besos de profundidad - Leonard Cohen






Viniste a mí esta mañana



y me trataste como si fuera carne.



Hay que ser un hombre para saber



Qué bien se siente eso, cuán dulce.



Mi doble en el espejo, mi misma sangre,



te conocería hasta durmiendo.



¿Y quién sino tú podría llevarme,



a mil besos de profundidad?



Te amé cuando te abriste



como una azucena al calor.



Mira, soy tan sólo otro muñeco de nieve



parado bajo la lluvia y la cellisca,



que te amó con su amor helado,



su físico de segunda mano,



con todo lo que es, y todo lo que fue,



a mil besos de profundidad.



Sé que tenías que mentirme,



sé que tenías que engañarme,



Posar con todo el ardor y la altivez



tras los velos de la pura falsedad.



Nuestro perfecto porno aristócrata,



tan elegante y barato.



Soy viejo pero eso aún me gusta,



a mil besos de profundidad.



Soy bueno en el amor, soy bueno en el odio,



es entre medio donde me congelo.



He estado preparándome pero es demasiado tarde…



hace años que es demasiado tarde.



Pero tú estás hermosa, de verdad,



te aman por la calle.



Si estuvieras aquí me arrodillaría por ti,



a mil besos de profundidad.



El otoño se mueve a través de tu piel,



algo me ha entrado en el ojo,



una luz que no necesita vivir



ni necesita morir.



Un enigma en el libro del amor,



oscuro y obsoleto,



hasta que sea visto, aquí, en tiempo y sangre



a mil besos de profundidad.



Aún funciono con vino,



aún bailo mejilla con mejilla.



La banda está tocando Auld Lang Syne



pero el corazón no va a doblarse ….



Bailé con Diz, canté con Ray,



aunque nunca pude tocar como ellos,



Pero una o dos veces me invitaron a tocar



a mil besos de profundidad.



Te amé cuando te abriste



como una azucena al calor.



Mira, soy tan sólo otro muñeco de nieve



parado bajo la lluvia y la cellisca,



que te amó con su amor helado,



su físico de segunda mano,



con todo lo que es, y todo lo que fue,



a mil besos de profundidad.



Pero ahora no necesitas oírme,



cada palabra que diga



sólo irá en contra mía



a mil besos de profundidad.



No hay comentarios: